Esta maravilla de la repostería sueca merece un sitio en la mesa esta Navidad.
Los bollos de santa Lucía forman parte de la tradición navideña en Suecia y, aunque lo bueno si es breve, dos veces bueno, a los suecos les encanta comerlos durante todo el mes de diciembre. Existe, además, una forma mágica de llevarlos a otro nivel. Fue una idea de los sumilleres Niklas Löfgren y Fredrik Lundberg: montar la nata sin que quede demasiado firme, ligera como si fuera para un café irlandés. Poner la nata en cuencos pequeños para mojar —¡pero sin mojar dos veces un mismo trozo!— y abrir una botella de sauternes. Primero se moja el bollo de santa Lucía, luego se le da un bocado y, por último, se toma un sorbo de sauternes.
PARA UNOS 30 BOLLOS
1 remesa de masa de azafrán (la encontrarás en página 113 de Bollería).
60 pasas
BAÑO DE HUEVO
2 huevos
Una pizca de sal
1 cdta. de agua
1. Divide la masa de azafrán en porciones de 70 gramos y boléalas (página 29). Forma rulos finos de unos 10 centímetros de largo y colócalos sobre una superficie muy poco enharinada. Cúbrelos con un trapo de cocina para evitar que se sequen. Deja que reposen durante 5 minutos para que se libere la tensión.
2. Rueda cada rulo hasta que tengan unos 30 centímetros de largo y enrolla los extremos de manera que se forme una S. Distribúyelos en bandejas cubiertas con papel de horno. Estos bollos necesitan mucho espacio para levar, por lo que no conviene colocar más de 9 unidades por bandeja. Cuando estén todos formados, incrusta una pasa en cada extremo.
3. Presiónalas con firmeza porque de lo contrario, al levar, las pasas subirán y se caerán.
4. Calienta el horno a 50 °C y coloca en la base una fuente con agua para generar vapor. Cuando el horno haya alcanzado la temperatura indicada, introduce las bandejas y apágalo. Deja que los bollos leven hasta duplicar el volumen, de 1 a 2 horas aproximadamente.
5. Retira la bandeja del horno y deja los bollos a temperatura ambiente.
6. Calienta el horno a 200 °C, con ventilador, y espera a que alcance la temperatura indicada.
BAÑO DE HUEVO: mezcla los ingredientes y reserva.
Cuece los bollos de santa Lucía a media altura entre 5 y 8 minutos aproximadamente. Es muy importante que no se doren demasiado. Justo cuando empiecen a tener poco de color, sácalos del horno y píntalos enseguida con el baño de huevo. Así quedan brillantes y se mantienen tiernos todo el día. Deja que se enfríen sobre una rejilla.